Washington, (Revistalogos.com).-Las autoridades de Texas solicitaron hoy recuperar la tutela de ocho de los menores que fueron rescatados de una secta poligámica de ese estado, ante la sospecha de que podrían estar en contacto con adultos que han mantenido sexo con niños.
Según informan medios locales, el Departamento de Protección Infantil basa su argumento en que las cuatro madres de estos niños se han negado a perder el contacto con algunos de los hombres implicados en matrimonios con chicas menores de edad.
"Continuamos estando preocupados por estos ocho niños -con edades comprendidas entre cinco y 17 años-, así que he hemos solicitado a la juez que revise el caso", señaló la portavoz de los Servicios de Protección al Menor, Marleigh Meisner.
El pasado 4 de abril las autoridades entraron por la fuerza en un rancho en El Dorado (Texas) que tenía la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (FLDS, por su sigla en inglés) donde, según las autoridades, se forzaban los matrimonios con adolescentes.
En la operación policial se rescataron a 460 menores, que quedaron bajo la tutela estatal, ante el peligro de que se estuvieran produciendo abusos sexuales infantiles.
A finales de mayo, el Tribunal Supremo de Texas dictaminó que los niños debían volver con sus padres, con el argumento de que el Servicio de Protección al Menor había sobrepasado sus competencias, si bien ninguno de los pequeños volvió al rancho.
Según informan medios locales, el Departamento de Protección Infantil basa su argumento en que las cuatro madres de estos niños se han negado a perder el contacto con algunos de los hombres implicados en matrimonios con chicas menores de edad.
"Continuamos estando preocupados por estos ocho niños -con edades comprendidas entre cinco y 17 años-, así que he hemos solicitado a la juez que revise el caso", señaló la portavoz de los Servicios de Protección al Menor, Marleigh Meisner.
El pasado 4 de abril las autoridades entraron por la fuerza en un rancho en El Dorado (Texas) que tenía la Iglesia Fundamentalista de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (FLDS, por su sigla en inglés) donde, según las autoridades, se forzaban los matrimonios con adolescentes.
En la operación policial se rescataron a 460 menores, que quedaron bajo la tutela estatal, ante el peligro de que se estuvieran produciendo abusos sexuales infantiles.
A finales de mayo, el Tribunal Supremo de Texas dictaminó que los niños debían volver con sus padres, con el argumento de que el Servicio de Protección al Menor había sobrepasado sus competencias, si bien ninguno de los pequeños volvió al rancho.
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